Quiero cumplir un sueño

Hablando con una amiga, sobre las reuniones a las que he podido asistir vistiendo como en el siglo XIX, me comentaba que le parecía una locura y muy difícil poder llegar a realizar una cosa así y más en nuestro país. Yo antes (y mucha gente) pensaba igual. Le gustaría poder hacerlo pero o no se atreven, creen que no tienen edad para "disfrazarse", no saben coser, no saben a dónde ir,...Todos son escusas. Lo que primero se debe plantear es si quieres hacerlo de verdad, es decir, si te gusta algo lucha por hacerlo realidad. Yo puedo dejar aquí los pasos que seguí para ver mi sueño hecho realidad, y a lo mejor alguien más se anima a hacer realidad el suyo :-). Primero aclararé esas pequeñas "dudas" que se puedan tener.

En lo que se refiere a la edad o la osadía: no existe límite, es decir, si te gusta no es algo que sea para una edad determinada. Lo que tienes que ver es si quieres hacerlo.

Recreadores americanos

Una vez que ya te has decidido, puedes elegir una época que te guste. Ahora tenemos un arma muy poderoso que se llama "Google" y que nos viene muy bien para movernos por todo el mundo y todas las épocas. El cine también es un buen aliado, pero hay que tener cuidado con las películas en las que nos fijamos, pues no todas son "históricamente correctas". Hay fallos sobre todo en elegir vestidos de baile o de noche para el día, o que no concuerdan exactamente con una década determinada o que los peinados no son los que se llevaban.

Famoso vestido de Escarlata. Las mangas NO son de un vestido de día y el pelo tampoco lo llevaría corto y suelto.

Imagen de "Young Victoria", ganadora de varios premios de vestuario.

Los peinados y los vestidos, además de bonitos son copiados de la época.

Para no cometer este tipo de errores siempre se puede recurrir a los libros de Historia, museos de indumentaria o de pintura (Museo del Traje y Museo del Prado, por ejemplo), láminas antiguas o fashion plates, y por supuesto la red. También recomiendo seguir blogs o webs donde se habla de la época que interesa, en mi caso de la época victoriana, como la SVA y otros grupos españoles; y por supuesto los extranjeros, que en esto de recrear nos llevan más años. Por lo tanto, antes de lanzarse hay que buscar información y más información para que nuestro proyecto quede realmente creíble. 

Bueno, ya está tomada la decisión y nos hemos decantado por un estilo, "y ahora, ¿cómo me hago el traje? Si lo encargo me va a salir carísimo". Esa sería una buena opción. Como comprarlo hecho en alguna web que lo hacen a medida, incluso. Pero si no se poseen los recursos económicos para ello, podemos conseguir patrones (también on-line o en algunas mercerías) para realizar nuestro sueño. Si no se sabe coser, siempre se puede pedir ayuda a alguien que nos puede facilitar la tarea. Lo cierto es que es la parte más pesada de todo el proceso, pero a la vez la más gratificante cuando se ve como avanza y va tomando forma.

"Visualizando" el traje. Patrón.

Piezas del patrón sobre la tela.

Una de las muuuuchas pruebas.

Va pareciendo un vestido.

También es bueno cometer errores y equivocarse -aunque desesperes y quieras tirar todo por la ventana-, pero así tienes una lección más aprendida para el próximo proyecto (sí, seguro que vas a querer hacer otro después, jeje). Este es un breve resumen de lo que implica conseguir por tus propios medios un traje histórico. 

Y ahora ya lo tienes todo, has comenzado a "investigar", has conseguido un buen patrón, has aprendido costura y encima te has hecho un traje completo, pero ¿dónde lo puedo lucir? Bien, este punto nos lleva al primero, en el que tendríamos que definir, si es posible, algún evento que se organice para recrear, puede ser un evento cultural como la Ruta del Romanticismo de Almendralejo o bélica como el Bicentenario de la Constitución de Cádiz. Afortunadamente cada vez se dan más ocasiones en las que poder participar sin salir de nuestras fronteras, y cada vez hay más personas apasionadas por la recreación histórica. Por lo tanto, ya no hay escusas para hacer lo que más te gusta.